Flora (Panamá)
Manzanillo de playa
La manzanilla de la muerte, manzanillo de playa o árbol de la
muerte, es una especie del género Hipomane. Es un árbol de la familia de las
euforbiáceas, nativo de Mesoamérica y las islas del Mar Caribe. Como muchas
otras euforbiáceas, es poderosamente tóxica, y su fruta —similar a la manzana,
y de agradable aroma— puede resultar mortal para los seres humanos.
La manzanilla de la muerte es un árbol de buen porte; puede
alcanzar los 20 m de altura si su fuste crece de forma recta, pero por su
distribución costera no es raro que se desplome durante su crecimiento, al no
poder el suelo arenoso y mojado retener su peso, y que adopte luego una forma
casi rastrera y sumamente tortuosa. El tronco y las numerosas ramas están
cubiertos de una corteza gruesa y quebrada, de color gris. La copa es amplia y
globosa.
Las hojas son simples, alternas, de forma elíptica, coriáceas,
con prominentes nervaduras de color amarillo y el pecíolo largo. El perennifolio,
aunque pierde parte de su copa durante la temporada más seca, entre diciembre y
enero. A comienzos de la temporada de lluvias produce inflorescencias en
espigas axilares de hasta 7 cm de largo; la inflorescencia contiene una o
dos flores femeninas rudimentarias, de unos 3 mm de diámetro, reducidas a un
ovario bulboso y un estigma de forma estrellada, colocadas en
posición basal, y flores masculinas más pequeñas, dotadas de numerosas anteras
amarillas, a lo largo del resto. Las flores aparecen constantemente a lo largo
del año, aunque su mayor número se presenta en marzo. La polinización es
entomófila.
Fructifica
produciendo un pomo de forma globosa, de unos 4 cm de diámetro, muy fragante,
cubierto de una piel glauca y brillante, que contiene varias semillas
redondeadas de color pardo. Todas las partes del árbol, corteza, hojas, flores
y frutos, dejan manar al romperse un látex blanquecino y poderosamente
irritante. Su contacto con la piel provoca irritaciones, quemaduras, ampollas e
inflamación, pudiendo ocasionar ceguera en contacto con los ojos o la muerte de
ser ingerido.
La planta es severamente tóxica para los humanos y posiblemente para todos los mamíferos, aunque algunos reptiles se alimentan de sus frutos y se alojan en su copa.
El manzanillo de la
playa ha sido usado para hacer muebles desde la época colonial.
Se cree que su
venenosa savia se neutraliza secándola al sol. Sin embargo, quienes manipulan
la madera recién cortada deben ser cuidadosos.
Savia
Los nativos cubrían sus
flechas con el veneno cuando iban a cazar.
Corteza y frutas
Hay documentos que
muestran que la goma de la corteza ha sido usada para tratar enfermedades venéreas
y hidropesía en Jamaica, y las frutas secas, como diuréticos.
Comentarios
Publicar un comentario